La formación en el turismo activo, clave para la competitividad del sector

noviembre 22, 2021 admin

El siguiente artículo ha sido redactado por el gestor deportivo Ángel Rubio Hidalgo.

En materia de legislación, la profesionalización del sector deportivo en nuestro país ha sido uno de los problemas a abordar más complejos para los gobiernos e instituciones. Tratar un sector tan transversal como es el deporte, obliga a las leyes erigidas en torno a él a ser extremadamente precisas y concretas para evitar el intrusismo y la mala praxis en el mismo.

Es de especial relevancia la diversidad de servicios ofrecida en el denominado Turismo Activo, permitiendo conjugar el ocio y el deporte por parte de sus usuarios mientras se viaja (con un crecimiento del 20-30% de este tipo de actividades en 2021), valiéndose de como el turismo nacional y las actividades al aire libre se ven actualmente más demandadas que nunca debido a los efectos de la pandemia en los hábitos de la población.

La heterogeneidad en la oferta de actividades que el turismo activo plantea a sus usuarios, genera una necesidad de tecnificación profesional variada y extremadamente específica para sus ofertantes. Esto hace a su vez que los conocimientos técnicos necesarios para ofrecer un catálogo de servicios de calidad, y ante todo seguros para sus practicantes, requieran de una formación incomparable a la del turismo tradicional.

Desde múltiples organismos, como el COLEF o la ANETA, se defienden e impulsan multitud de proyectos formativos, como el programa ELESA, que buscan dotar a los profesionales del Turismo Activo de títulos y certificados que realmente doten al sector de una adecuada y reconocida preparación.

Contar con este tipo de formación nos haría situarnos a la altura de los estándares europeos que ofrecen al usuario garantías en la adecuación de los mismos, sin la cual, la actual oferta nacional en Turismo Activo se encontrará lastrada de forma irremediable frente a la competencia europea.