Gestión deportiva: diferencias entre la NBA y las ligas europeas
Los modelos de gestión varían de manera significativa entre las ligas europeas y las estadounidenses. En este artículo tomaré como ejemplo a la NBA en contraste con las ligas europeas de baloncesto para poner de manifiesto estos valores que distinguen la gestión deportiva de ambos modelos y que provocan diferencias sustanciales en el juego.
En primer lugar, no cuentan con las mismas reglas, en la NBA tienen sus propias reglas mientras que, en el resto de las ligas, se juega bajo las reglas de la FIBA.
Por otra parte, uno de los factores que más destacan a la hora de comparar la NBA con otras ligas europeas es el modelo de propiedad que tienen. En la NBA, los equipos representan franquicias que pertenecen a la liga, es decir, que no se tratan de clubs independientes. Por el contrario, en las ligas europeas, los clubs son entidades independientes y cuentan con más autonomía en la toma de decisiones propias del club, mientras que en la NBA se necesita un mayor consenso por parte de los equipos para la toma de decisiones debido a la centralización en torno a la asociación.
Asimismo, otro factor muy importante que diferencia estos modelos es el de la igualdad económica. En la NBA, los ingresos que tiene la liga por derechos de televisión a nivel nacional e internacional se reparten de manera equitativa entre todas las franquicias, no existen privilegios ni bonificaciones por rendimiento o por impacto. Además, en la NBA existe un tope salarial. En las ligas europeas, sin embargo, los equipos se enfrentan a desigualdades mucho más marcadas que dependen entre otras cosas a diferencias en los mercados y de los contratos de televisión.
En lo referente a la competición, también existen diferencias sustanciales entre las ligas europeas de baloncesto y la NBA. En el caso de la NBA, no hay posibilidad de descender de categoría. La liga está compuesta por 30 franquicias que forman parte de la liga sin importar el rendimiento que desempeñen. Por el contrario, en las ligas europeas existen ascensos y descensos de categoría, lo cual genera un escenario de competición muy diferente.
Esto podría suponer una desventaja en cuanto al rendimiento de los equipos de la NBA, sin embargo, esto no les afecta debido al modelo que tiene la liga llamado Draft, un procedimiento que tiene por objetivo equilibrar el nivel de los equipos para que la competición sea lo más entretenida e igualada posible. Con este procedimiento, los equipos tienen todos los años la oportunidad de elegir a jugadores nuevos para la siguiente temporada de entre los mejores jugadores jóvenes del mundo. En cuanto al orden de elección del draft, se realiza bajo los siguientes criterios:
- En las catorce primeras posiciones se distribuyen los equipos no clasificados para play-off, es decir los 14 con peor rendimiento en la temporada. La posición que ocupan se establece mediante un sorteo, en el cual tienen más posibilidades de ocupar las primeras plazas los equipos que han acumulado más derrotas.
- En las posiciones 15-30, se sitúan los 16 equipos clasificados para los play-offs, en orden inverso a su récord en la liga regular recién concluida.
Este método resulta muy interesante ya que implica que se esté reestructurando constantemente la liga dando la oportunidad a todos los equipos de conseguir competir brindando ventajas a los equipos más débiles. Mientras que en la ACB y en el resto de las ligas europeas, solamente los equipos más fuertes pueden optar a tener super estrellas.
En relación con la gestión de las crisis, la NBA ha demostrado en los últimos años ser mucho más resolutiva y ágil que el resto de las ligas. Ejemplo de ello fue la gestión rápida y eficaz que hizo la NBA en la famosa burbuja en Disney World, que puso en marcha la asociación en el momento de la pandemia para finalizar la temporada. Esto se debe también a que su modelo esta centralizado por lo que se pueden tomar decisiones más rápido.
A modo de resumen, cabe destacar que mientras que la NBA ha optado por un modelo donde se da prioridad a la igualdad económica y la formación de una liga cerrada en la que prime la cohesión entre los equipos, las ligas europeas cuentan con mayor diversidad de gestión ya que existe una relación más directa entre los clubs y la competición en sí.
Manuel Esparza Carbonell
Estudiante del Máster en Gestión Deportiva de la UPV