La importancia del crecimiento en los eventos deportivos.

A principio de 2022 recibíamos todas las personas apasionadas al deporte, y más concretamente al tenis, una fantástica noticia: la vuelta de la Copa Faulcombridge
al Club de Tenis Valencia.

Y es que, tras una etapa sin celebrarse por diversas circunstancias, este torneo parece que ha vuelto para quedarse. Nacido en 1933 tras el fallecimiento y en honor del entonces Presidente del Club, Alfredo Faulcombridge, se estableció rápidamente como el mayor evento tenístico de la Comunitat Valenciana. Esta idea
ha sido uno de los principales fundamentos por los que se ha retomado este proyecto; contar en la Comunitat Valenciana, y más concretamente en su capital,
Valencia, con un torneo de tenis importante y relevante no únicamente a nivel local y regional, sino también a nivel nacional. Así lo ha manifestado su director y propulsor en esta nueva etapa, el extenista valenciano Pablo Ándujar, en varias entrevistas:

“Mi sueño es traer un ATP 250 a Valencia”.

Por ello, en 2022 tuvo lugar el primer paso de este camino; se incorporó a la sexta edición del BBVA Open Ciudad de Valencia, perteneciente al circuito ITF femenino, la histórica Copa Faulcombridge, como torneo masculino ATP Challenger 90.

En este sentido, este torneo se estrenó en su vuelta “a lo grande”, iniciando su regreso como un torneo con licencia ATP, y recibiendo en las instalaciones del Club
de Tenis Valencia a grandes nombres del tenis mundial como Roberto Carballés Baena, Carlos Taberner o Nuno Borges, entre otros. En esta edición, el torneo repartió 67.960€ en premios y fue capaz de contar con un patrocinador privado de renombre, como es la empresa de equipamientos de tenis, “Tennis-Point”, así como con diversas instituciones públicas: Real Federación Española de Tenis (RFET), Federación de Tenis de la Comunitat Valenciana (FTCV), Generalitat Valenciana o Ajuntament de València.

Tras esta exitosa edición del torneo, en 2023 el crecimiento como evento deportivo fue notable. La partida de premios fue en esta ocasión de 118.000€, aumentando su categoría de un torneo ATP Challenger 90 a convertirse en un ATP Challenger 100. En esta ocasión, algunos de los profesionales de los que pudieron disfrutar los asistentes al torneo fueron Roberto Bautista, Fabio Fognini o el mismo Pablo Ándujar, que tuvo la oportunidad de despedirse del tenis profesional en su ciudad natal y como invitado de su propio torneo. La edición, a nivel de patrocinios, no sólo consiguió ampliar el compromiso de las entidades privadas y públicas que participaron en 2022, sino que aumentó el número de patrocinadores, incorporando a empresas como Marcos Automoción o Lacoste, entre otros.

Finalmente, la edición celebrada durante la segunda semana de octubre de este mismo año ha sido un auténtico éxito, una vez más, certificando la consolidación
de este torneo tanto en la agenda de eventos deportivos de Valencia como en la lista de torneos ATP Challenger. En esta ocasión, el torneo ha sido capaz de
configurarse como ATP Challenger 125, mejorando la categoría Challenger 100 del pasado año. La aportación en premio monetario ha ascendido en esta edición a
148.625€, atrayendo a jugadores de talla mundial como los valencianos Pedro Martínez, Bernabé Zapata o Carlos Taberner, el internacional español Albert Ramos
o la estrella francesa Benoît Paire.

En cuanto a patrocinios, cabe destacar la entrada de Marcos Automoción como “naming sponsor”, pasando a ser el nombre oficial del torneo “Copa Faulcombridge
by Marcos Automoción”. También es destacable la incorporación de nuevas empresas patrocinadoras como Mapfre, Oliva Nova Beach & Golf Resort o Amstel, entre otras.

En definitiva, la Copa Faulcombridge es un ejemplo claro de la importancia del crecimiento constante, la evolución y la adaptación a los cambios para garantizar
la relevancia y éxito de un evento deportivo. Desde su relanzamiento en 2022, este torneo ha mostrado una progresión ascendente, no solo en términos de participación de jugadores de alto nivel y premios monetarios, sino también en la atracción de patrocinadores de prestigio y el aumento de su categoría dentro del circuito ATP. Este desarrollo demuestra que un evento deportivo necesita renovarse y mejorar constantemente, ampliar sus horizontes y fortalecer su impacto tanto a nivel local como internacional para consolidarse en el panorama deportivo.
Este progreso no solo impulsa la economía local, sino que también posiciona a una ciudad como Valencia dentro del panorama del tenis internacional.

En conclusión, el caso de la Copa Faulcombridge ilustra que un evento que busca expandirse y mejorar con el tiempo no solo perdura, sino que logra convertirse en una referencia tanto para deportistas como para aficionados y patrocinadores.

Iván Sierra

Estudiante del Máster en Gestión Deportiva UPV