ÉXODO MUNDIALISTA
Como todos bien sabemos el fútbol es uno de los deportes más apasionantes del mundo, y la Copa del Mundo de la FIFA probablemente sea la evidencia más clara de ello. Tal es así que cada cuatro años millones de fanáticos de todo el mundo son capaces de viajar miles de kilómetros solo con el objetivo de ver jugar un partido de su selección.
A raíz de ello, obtener el privilegio de ser el país organizador de la Copa del Mundo es un beneficio muy importante para los anfitriones, ya que durante ese periodo el turismo alcanzará cifras irrepetibles, ya sea en ingresos de divisas extranjeras, como en visitantes. Y además de estos aspectos netamente turísticos, hay que tener en cuenta que durante los años previos al mundial, el anfitrión tendrá que realizar un importante inversión en infraestructura (estadios, transporte público, hotelería, caminos, etc) la cual, además de que una vez finalizada la competición quedará a disposición de todos sus ciudadanos también generará miles de puestos de trabajo calificados y no calificados.
Este año Qatar, según estimación gubernamental, espera recibir 1.200.000 hinchas de todo el mundo y unos ingresos estimados en 17.000 millones de dólares, una cantidad que en principio parece mucho, pero se encuentra muy alejada de las cifras de la inversión realizada en 220.000 millones.
Para tomar dimensión de lo que significa el mundial en términos de turismo, durante todo el año 2019 Qatar recibió cerca de 2.140.000 turistas (fuente: datosmundial.com) apenas 1 millón más que durante la Copa del Mundo que solo dura 30 días.
Qatar se preparó para recibir fanáticos de todo el mundo, en lo que va a ser el evento deportivo más importante del año, recibiendo turistas de más de 30 países distintos con una gran diversidad cultural.
El ranking de entradas vendidas a cada país se encuentra de la siguiente manera (fuente: ole.com.ar): Qatar, Estados Unidos, Arabia Saudita, Inglaterra, México, Emiratos Árabes Unidos y Argentina.
Con todos los ingredientes futbolísticos y extrafutbolísticos esta Copa del Mundo tiene todo lo necesario para ser una fiesta.
Álvaro Cristia.
Estudiante del Máster en Gestión de Empresas Deportivas de la UPV.
